Este fué mi primer viaje, lo hice solo, hacia 2 a 3 meses que habia comprado la bicicleta de fierro y tan solo por 200 soles (no sabia que habian de aluminio, en realidad no sabia nada de bicicletas), pero alguna vez vi a un par de gringos viajar en bici, asi que se me ocurrió hacerlo tambien, alisté mi mochila y me lancé, ahora despues de varios años pienso que realmente fué una osadia, por que no llevaba camara de repuesto, ni inflador, nada absolutamente nada mas que mi ropa y un poco de dinero para regresar, menos mal que no tuve ningun inconveniente, un viernes por la noche tomé el bus que me dejaría en Ticlio, a eso de las 5 o 6 de la mañana me bajé, no en Ticlio sino un poco mas abajo, ya que el chofer no se acordó de avisarme, bien para mi por que estaba lloviznando, ya en la carretera dejó de lloviznar pero hacia mucho frio, la bajada hasta La Oroya fué muy facil, llegando tomé un rapido desayuno y seguí rumbo a Tarma, iba despacio por que no estaba acostumbrado a pedalear, en algunos tramos tuve que caminar por que ya mis piernas no resistian, llegúe a un desvío en la carretera, y tuve que tomar un taxi por que me dijeron que antes de bajar hacia Tarma habia un tramo de mucha subida y yo ya no podia pedalear mas, el taxi me dejó en la cumbre y ya se hacía de noche, ya era todo de bajada asi que traté de bajar lo mas rapido que mi poco visión lo permitia, cerca a la ciudad ya la oscuridad era total asi que iba mas lento que una tortuga, aprovechaba la luza de algun carro para avanzar lo mas que podia, desde lo alto se veian las luces de la ciudad y eso me motivo a seguir, de pronto ya estaba en la entrada de Tarma, fuí feliz, como era semana santa habia mucha gente en las calles, me di una vuelta por toda la ciudad no sin antes comprar mi pasaje de regreso en bus hacia Lima.
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